¡Conoce las funciones de los procesadores de alimentos!

En la cocina, se nos hace siempre complicado triturar o desmenuzar los alimentos con un cuchillo de casa. Si lo hacemos, los resultados siempre serán trozos grandes de comida o masas grumosas de alguna preparación.

Es por ellos, que, gracias a los avances tecnológicos, hoy ya podemos tener en nuestra casa un procesador de alimentos.

Esta maravilla para la cocina es un artefacto electrodoméstico multifuncional permite picar frutos secos, semillas, especias y carne, rebanar y trozar verduras, rallar queso o verduras, mezclar, amasar, entre otras funciones.

No todos los procesadores de alimentos son iguales. Existe una gran variedad de este artefacto en modelos, marcas, precios y usos (algunos son de uso doméstico y otro para uso industrial). Existen algunos con mayor potencia que otros. Sin duda, la fuerza de estos aparatos no puede compararse con una licuadora o batidora, ¡ES EL TRIPLE DE POTENTE! Esto no sólo nos permite obtener buenos resultados con nuestros insumos, sino también a ahorrar tiempo: lo que nos tomaría con una licuadora aproximadamente 30 minutos, con el procesador lo haremos en 5.

Gracias a las grandes hélices que tiene y a la fuerza que posee, podemos rayar infinidad de alimentos como zanahoria, cebollas, papas, hojas de albahaca, etc. que nos permitirá obtener en el estado que queremos estos insumos para que sean utilizados.

Para ahorrar aún más tiempo, es posible combinar en el vaso de mayor tamaño (comparándolo con una licuadora) que posee todo lo que deseemos picar y, posteriormente, unificar en una sola mezcla. Podemos preparar pesto, barras de cereales, galletas, masas de hamburguesas, pizzas, etc. en un abrir y cerrar de ojos.

Preparar crema de chantilly nunca había sido tan fácil con una máquina de estas. Montar claras a punto nieve es complicado y toma más tiempo si la realizamos a mano. Además, la textura no siempre es la deseada. Todos estos buenos resultados los obtenemos sin ningún esfuerzo con un procesador de alimentos. El esfuerzo será al momento de devorarte todos los postres deliciosos con bellas decoraciones que puedes llegar a hacer con esta máquina multifuncional.

Gracias a sus cuchillas es posible triturar algunos alimentos y conseguir una textura untuosa ¡Sin necesidad de algún líquido! ¿Puedes creerlo? Con un procesador de alimentos podemos obtener mantequillas, mermeladas, masas, cremas, etc. de manera práctica, fácil y rápida.

Como todo envase, tiene marcas y numeraciones en el vaso en donde colocamos nuestros alimentos. Los procesadores tienen una raya que especifica el límite máximo de líquido que podemos colocar. Debemos tomarlo en cuenta para evitar derrames. De igual forma, es necesario que si el vaso del procesador se encuentra roto o rajado, no coloquemos liquido ya que, como es evidente, saldrá esparcido y podría llegar a arruinar nuestra mezcla.

Aunque parezca casi imposible, podemos moler café en esta máquina multifuncional. Si eres de los que dejaban en el olvido los granos de café en el supermercado porque no sabías como molerlos, aquí te damos a conocer la herramienta para prepararte esa deliciosa bebida por las mañanas sin recurrir al café artificial que nos suelen vender.

En el mercado, existen procesadores de alimentos de todos los precios y tamaños, adecuándose a su uso. Los precios oscilan de entre los 199 soles, que son más para el uso doméstico en donde no se requiere usarlo frecuentemente y/o se colocan pocas cantidades de alimentos, hasta de 499 soles, que son para uso profesional, negocios gastronómicos, para grandes producciones de alimentos, etc.

Cuando deseemos adquirir un artefacto como este, es necesario comparar entre varios de diferentes marcas para saber que te ofrecen y si tienen las funciones que necesitas para el uso que quieres darle. También debemos tener en cuenta el tamaño de la máquina ya que estas tienden a ocupar mucho espacio de almacenamiento y si tu cocina es pequeño, un procesador grande puede no ser necesario. Existen versiones pequeñas de gran potencia que pueden servir a que tu compra sea igual de provechosa como si fuese uno de mayores proporciones.